VIDRIO ACÚSTICO
Para comprender cómo se propaga el sonido, hay que entender que es una vibración y como tal tiene la facultad de ocurrir en cualquier medio material, sin importar que este sea gaseoso, líquido o sólido, esto se denomina onda mecánica, y se comportan como las ondas de un estanque al tirar una piedra. En aluminios Fiser, tenemos en cuenta el control acústico para ventanas de aluminio.
Todas las ondas mecánicas requieren:
- Alguna fuente que cree la perturbación. ( el ruido de un coche)
- Un medio en el que se propague la perturbación. (el aire)
- Algún medio físico a través del cual elementos del medio puedan influir uno al otro.
(Vidrio normal de una ventana que vibra y comunica el sonido del coche)
Teniendo en cuenta que solo el vacío absoluto puede detener el sonido, ¿cómo podemos conseguir vidrios acústicos de apenas unos centímetros?
Eso es posible utilizando una propiedad conocida como refracción, cuando una onda que se propaga por un medio pasa a otro medio en el que su velocidad de propagación es diferente, cambia su dirección y se produce además una pérdida de energía en este cambio.
Basándonos en la refracción del sonido podemos diseñar vidrio laminados con PVP (butiral de polivinilo) de diferentes densidades y crear un excelente aislamiento acústico en muy poco espacio.
La industria en este aspecto ha evolucionado mucho y los vidrios de control acústico actuales, son más luminosos y delgados que sus antecesores.